Manometría anorrectal: para qué sirve y cómo se realiza - THDLAB - ES

  • Manometría anorrectal: para qué sirve
  • Manometría anorrectal: preparación
  • Manometría anorrectal tradicional: cómo se realiza
  • Evolución de la manometría anorrectal: características y ventajas

Manometría anorrectal: para qué sirve

La manometría anorrectal es un examen utilizado para evaluar problemas en el funcionamiento de los esfínteres anales. Este examen también es útil para profundizar en el diagnóstico de numerosos trastornos anorrectales.

La manometría rectal también se utiliza para la evaluación pre y/o posoperatoria de intervenciones en la zona anorrectal. En diversos casos, tales intervenciones pueden conllevar riesgos para la continencia anal.

Mediante manometría, el médico mide la presión de los esfínteres durante la evacuación, en reposo o durante la contracción. De este modo, el especialista puede evaluar la capacidad de controlar el paso de heces líquidas, heces sólidas o gases intestinales. Estas evaluaciones se realizan teniendo en cuenta sexo, edad, partos y otras patologías.

Durante la evacuación, los músculos del esfínter deben relajarse para permitir el tránsito de heces y gases. Por el contrario, para posponer la evacuación, los esfínteres deben contraerse lo suficiente.

También es importante que los esfínteres ejerzan la presión adecuada incluso en reposo para evitar pérdidas involuntarias durante el sueño o al toser. Cualquier elemento que pueda alterar estos mecanismos puede tener un impacto en la continencia.

Por lo tanto, el diagnóstico preciso de posibles trastornos de los esfínteres es esencial para definir el proceso terapéutico.

Mediante manometría anal es posible estudiar objetivamente la función general de los esfínteres. El médico evalúa los esfínteres en fase de evacuación, reposo y contracción, e identifica cualquier anomalía. En concreto, la manometría permite identificar:

  • problemas de incontinencia relacionados con la incapacidad de los músculos del esfínter para contraerse adecuadamente;
  • dificultad para defecar debido a la apertura y liberación incompletas de los músculos del esfínter.

Hasta la fecha, no existen pruebas de diagnóstico alternativas a la manometría anal para obtener este tipo de datos. Por eso, en caso de síntomas relacionados con alteraciones del funcionamiento de los esfínteres anales, la manometría anorrectal es una prueba fundamental.

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Manometría anorrectal: preparación

Para la preparación del examen, el médico puede requerir la ejecución de un enema. La manometría se realiza generalmente en modo ambulatorio y no requiere anestesia. No se requiere ayuno, suspensión de terapias existentes o cambios de dieta en los días previos. El paciente puede ir al examen solo, ya que la manometría no prevé la administración de ningún fármaco.

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Manometría anorrectal tradicional: cómo se realiza

La manometría clásica es un examen ambulatorio utilizado para examinar los mecanismos de evacuación y contención de las heces. El examen se realiza mediante un sistema de perfusión de agua o aire, catéteres especiales y un sistema de adquisición de datos.

El paciente se tumba sobre su lado izquierdo, acerca las rodillas al pecho y coloca los glúteos en el borde de la camilla (posición de Sims). El especialista introduce un catéter con un pequeño globo en el canal anal hasta la ampolla rectal. En este punto, el médico insufla el líquido dentro del globo para dilatar el canal anorrectal. La dilatación simula la sensación de distensión y de estimulo para evacuar típica de la defecación.

El médico puede detectar la presión ejercida por el paciente en diferentes puntos del canal anorrectal e identificar las causas de trastornos como incontinencia e hipertonía del esfínter.

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Evolución de la manometría anorrectal: características y ventajas

Las recientes innovaciones tecnológicas han llevado a la evolución de la manometría anorrectal clásica. Ahora se dispone de equipos que permiten realizar la manometría de forma eficaz y con mayor comodidad para el paciente.

En cada vez más centros médicos, la manometría rectal se realiza mediante una pequeña sonda de alta sensibilidad. La sonda está conectada a un dispositivo portátil que permite medir en tiempo real las variaciones de presión y registrarlas. El examen no dura más de 5 minutos, por lo que los tiempos de espera se reducen drásticamente y la incomodidad del paciente es mínima.

Cada vez más ambulatorios utilizan este nuevo sistema de diagnóstico, gracias a su precisión y facilidad de ejecución e interpretación de los datos. Esto permite a los pacientes someterse a un examen extremadamente útil con molestias mínimas.

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